domingo, 24 de marzo de 2013

SEMANA SANTA EN ZAMORA


Zamora ciudad tan castellana, sobria y fría. Tal vez es una de las pocas ciudades donde hay otra fecha que no es Navidad, que hace que los zamoranos que viven lejos regresen... Esta fecha es su Semana Santa. Pocos son los zamoranos que no sienten un afecto especial por estas fechas y devoción por sus procesiones. Pero también temor... temor a que el tiempo haga que éstas no salgan, y es que las fechas coinciden en que se hace frecuente que la lluvia haga su aparición, por eso a veces el zamorano tiene la vista puesta en el cielo. No sólo por devoción sino también por temor a la lluvia.

Algunas de las procesiones, como la de la cofradía de la esperanza que sale por la mañana del Jueves Santo, proporciona algo más de color que otras. La música se hace algo más alegre e incluso la imagen con el manto verde dá una nota de color a esta procesión que cruza el río Duero en dirección a la ciudad. Esta cofradía data del año 1.960. Actualmente la componen 2.000 damas y casi 700 hermanos.

La Semana Santa está declarada de Interés Nacional y es una de las más antiguas de España. Una de las imágenes más veneradas está en la Catedral. Se trata del Cristo de las injurias, que sale al anochecer del Miércoles Santo. Se trata de una procesión de gran tradición y devoción. La impresionante talla es de autor anónimo y del siglo XVI. Algunos expertos en tallas la han catalogado como una de las mejores tallas de estilo renacentista.

Aunque Zamora mire al cielo para que no llueva, hay algunas procesiones que ni la lluvia las para. Se trata de algunas procesiones de penitencia como la impresionante procesión del Jueves Santo por la noche se trata de la cofradía Penitente Hermandad de Jesús Yacente. La talla es del siglo XVII y para las ocasiones que amenaza lluvia ó directamente llueve va tapada.

El silencio es impresionante mientras los 1.250 cofrades pasan despacio por las calles de la ciudad. La Semana Santa zamorana se pierde en el tiempo, pero hay documentos que la situarian ya en el año 1.179. Por tanto se trataría de una de la Semana Santa más antigua de España. Algunas de las cofradías que hoy existen se fundaron en el siglo XV.

Uno de los momentos más impresionantes de la Semana Santa de Zamora es el Miserere que se canta en la Plaza de Viriato mientras la imagen del Cristo Yacente gira en torno a una plaza llena de gente y en la cual se han parado los nazarenos.

Mucho se ha hablado de la autoría de la imagen del Cristo Yacente, también conocido como Cristo de la urna ya que se encontró metido en una urna en 1.941, año que se funda la actual cofradía. Se trataría de una obra del siglo XVII y el autor sería o Dionisio Alba, aunque posteriores estudios apuntan hacia Francisco de Fermín. 18 son las procesiones que se celebran (si el tiempo lo permite) en Zamora. Por lo tanto sería una de las ciudades españolas que más celebra la Semana Santa.

Pero la Semana Santa en Zamora es eterna y el visitante que no pueda ir en esas fechas tiene un impresionante museo de Semana Santa donde existen hasta más de 30 pasos algunos enormes están allí expuestos y costudiados durante todo el año, excepto en la Semana Santa que salen en la procesión que les toca, aunque a veces por medio de la lluvia se quedan sin salir. Algunos de esos pasos fueron realizados por el famoso escultor Mariano Benlliure.

Otra de las procesiones que recorren la ciudad durante el viernes santo es la del Santo Entierro que tiene en sus filas a 3000 cofrades. Cofradía fundada en 1.593 es de las más antiguas de la ciudad. Uno de los primeros pasos en desfilar es La Magdalena de 1.892.

Otra de las imágenes (la principal) de esta procesión es el impresionante Cristo del Santo Entierro realizada en el año 2.002. En esta procesión desfilan hasta 12 imágenes.
 
Cierra la procesión la Virgen de los clavos. Hay que recalcar que aunque algunos pasos van de vuelta al Museo de Semana Santa muchas otras están en sus respectivas iglesias. Sería imposible a pesar de que en Zamora hay muchas iglesias, colocar en ellas todos los pasos de Semana Santa. Incluso muchas de las procesiones tienen su origen o su destino en el propio Museo.

Otra de las imágenes más destacadas de la Semana Santa de Zamora es la que procesiona el Viernes Santo por la noche con la cofradía de Nuestra Señora de las Angustias, esta imagen es de 1.879. Se cree que esta cofradía la fundó el dominico San Vicente Ferrer en 1.412, por eso para celebrar los 600 años en el año 2.012 desfilo en esta procesión su imagen con la tradicional procesión que a punto estuvo de suspenderse por la lluvia. En esta imagen la imagen pasa por delante de la Iglesia de San Juan en plena Plaza Mayor donde se canta el "stabat mater".

De autor desconocido es éste Cristo de la Cruz de carne del siglo XVI que también procesiona el Viernes Santo.

El retorno al sepulcro vuelve a desfilar por la noche (ya lo hizo con la procesión de la tarde). Aquí vemos a sus dos imágenes principales bajo una fina lluvia. Ya que en ocasiones la lluvia aparece enmedio de las procesiones y por ese motivo hay que acortar la procesión.
Pero si hay alguna imagen que represente a Zamora es sin duda su célebre Soledad ó Virgen de la Soledad. Que aunque se la vista de negro y oro para la procesión más importante de todas que es la del Viernes Santo que sale a las cinco de la madrugada a los acordes de la marcha fúnebre de Thalberg y el sábado vuelve a hacerlo en solitario por la tarde vestida en un sencillo vestido negro que es donde Zamora, sencilla, sobria y castellana está más reflejada que nunca con esta imagen que cuando desfila el Viernes Santo las diez imágenes que desfilan con ella, al final acaban cediéndole el paso para ponerse a un lado y reverenciarla. Es la Reina de la Semana Santa de Zamora.

viernes, 15 de marzo de 2013

TEMPLO DE DENDERA

 Hacía pocas horas que acababa de poner el pié en Egipto por primera vez en mi vida. Las primeras horas en el aeropuerto mirando con atención las amenazas de un potencial peligro del que me habían advertido mis amistades. ¿Egipto? estás loco!!!. mi querida compañera de viajes fue la que me arrastró a ese potencial lugar tan sumamente peligroso para la gente que no conocía ese país, pero en el aeropuerto de El Cairo (donde tuvimos que permanecer unas tres horas hasta tomar otro vuelo a Luxor) no ví más que bastantes turistas que parecían relajados, gente mayor y niños extranjeros que habían pasado unas semanas en ese país, y que su en su cara se veía de todo menos temor ó miedo.

Me encontré con un país amable, pobre pero con una magia increíble. Luxor me encantó, era un regreso al pasado, y el primer lugar que visité fue este templo, que emocionaba tanto a mi compañera que me había arrastrado a ese país tan mágico por que ella ya había estado tres ó cuatro veces y ese templo estaba muy restringido por que anteriormente era una zona poco segura. Ahora se podía visitar. Iba a visitar un templo que ella no había visitado jamás y reconozco que me dejó una profunda huella, y tal vez por ser el primero, pero me dejó un recuerdo tal que ningún otro templo egipcio lo ha podido igualar. Se trata del templo de Isis-Hathor.

En una especie de exámenes que no lograba superar sobre antiguos faraones, mitos, dioses, etc que me hacía mi amiga, me parecía un rompecabezas dificil de componer. Allí tuve el primer contacto. Se trataba de Hathor que fue la madre de Horus, de hecho su nombre significa "templo de Horus" y a veces se representa por una bella mujer llamada Isis ó por una vaca que entre sus cuernos sostiene una especie de sol. Hija de Ra y madre de Horus fue la encargada de vengar la muerte del padre de Horus, Osiris. En lo alto de cada columna hay una cara de Hathor. Este es su templo.

Este templo está situado a menos de 3 km. de la ciudad de Dendera. Posee una superficie de unos 40.000 m2. A mí personalmente me "chocó" ese azul turquesa y ese colorido en el techo que casi me crea una tortícolis en el cuello de tanto alzar la vista. La vista de esos podencos negros que contrastan con el azul del fondo y todo ese colorido que dificilmente podemos disfrutar en otro templo. Tiene fama de ser uno de los templos egipcios mejor conservados del país. De aquí procede el famoso zodíaco de oro que está en el museo de Lovre de París que se data del siglo I a.c.  En 1.820 las tropas napoleónicas lo trasladaron a Francia.

Fue una suerte que cuando fuimos había poquísima gente por lo que nos facilitó poder hablar más tiempo con los guias locales y la gente que había en el templo. Poco a poco supe que el destino que había elegido había sido el correcto. En todo caso ver las paredes, columnas y techos con todos esos relieves me daba una especie de "sindrome de Stendhal" ya que me era imposible abarcar tanto detalle, por mucho tiempo que allí nos dejaran estar.

Incluso nos ofrecieron un té, no estaba mal para empezar. El calor dentro del templo era bastante soportable, y la verdad nos pudieron enseñar varias zonas que supongo que cuando hay mucha afluencia de gente no muestran. Por ejemplo el pozo. En este templo existen doce santuarios dedicados a divinidades egipcias. Desde el Imperio Medio este templo ha tenido varias modificaciones hasta llegar a la época del emperador Trajano época que se realizaron varias ampliaciones.

Este templo está a una distancia de unos 70 km. al norte de Luxor. Nectanebo I fue quién lo hizo construir. Criptas ó capillas funerarias tambien se pueden visitar en este templo, además de tumbas de animales. Tiene algunos aspectos muy parecidos al templo de Edfú ya que ambos son construcciones de la época Ptolemaica. Aquí se encuentroba la tumba de Osiris.

La sala hipóslita es una maravilla, es un bosque de columnas que se repite en muchos templos. Pero este con sus colores será irrepetible. El hecho de que se haya conservado tan bien, no fue ajeno a que este templo permaneció enterrado por arena y lodo hasta que se descubrió a mediados del siglo XIX. El templo al igual que todos los que están cerca del Nilo, posee el lago sagrado y el nilómetro. También posee una basílica cristiana que se instaló en tiempos del imperio romano y que se mucho más posterior ya que data del siglo V.
No sólo su interior nos dá muestras de su monumentalidad, sino que los muros exteriores (imagen de abajo) también son impresionantes. Unas esculturas en la pared que nos demuestran a Isis (Hathor) dando el pecho a Horus entre otras grandes paredes llenas de relieves. Como he dicho se necesita mucho tiempo para poder ver la magnífica cantidad de relieves, símbolos e iconos egipcios que encierra este impresionante templo. Un templo irrepetible.